Y sucedió que le
trajeron un paralítico, tendido sobre una cama; y al ver Jesús la fe de ellos,
dijo al paralítico: Ten ánimo, hijo; tus pecados te son perdonados.
Mateo 9:2
¿Alguna
vez te has sentido como aquel paralitico que cuenta la biblia? Atado siempre a aquel
lecho que lo acompañaba las 24 horas el día, no pudiendo valerse por sí mismo, sintiéndose
muchas veces un inútil ya que no podía realizar por cuenta propia lo que necesitaba
hacer.
Imagino que no siempre fue así, seguramente, gozaba de buena
salud, un trabajo, quizás una hermosa familia hasta que un día la tragedia tocó
a su puerta y es que nadie está libre de experimentar una situación de este
calibre, las tragedias no avisan su llegada, simplemente suceden en el momento
que uno menos lo espera, la angustia, la desesperación y la impotencia de no
poder hacer nada al respecto se vuelven cada vez más fuertes y humanamente no
podemos hacer nada, de pronto te vez atado a ella.
Mi amado hermano o amigo lector, quizás en este momento
estas atado a algún pecado y por más que intentas escapar de él tus fuerzas no
te lo permiten, lloras, te lamentas, quisieras romper con esas cadenas que te
atan pero no puedes, sientes que empiezas a levantarte y de pronto vuelves a
caer y eso te deprime y hasta te sientes un inútil en tus labores cotidianas
producto de esa manera de vivir y es que el pecado te hace sentir así.
Pero nada está perdido, hoy puede ser el día de tu liberación
y sanidad espiritual, Jesucristo está interesado en perdonarte primero y también
en hacerte libre de esa esclavitud o atadura del pecado, rodéate de personas
que te conduzcan a Jesucristo tal como lo hizo este hombre en este pasaje bíblico,
no te rodees más de amistades que te alejan de Dios y te envuelven cada día en el
pecado.
Hoy se rompen esas cadenas en el nombre de Jesús, hoy
Jesucristo pronuncia estas palabras sobre ti, Ten ánimo, hijo; tus pecados te son perdonados. Si, y hoy Dios te
ha llama hijo porque ve en ti la sangre de su amado hijo Jesucristo que te ha
purificado de toda maldad y pecado, solo acércate a él con fe y veras el
resultado.
Levántate y anda.
AUTOR: ESPÍRITU SANTO.

Amén Espíritu Santo, gracias por hablar a tu siervo quien inspirado escribió estas palabras, que dan Fe y Esperanza en la vida de cada persona que lee este mensaje.
ResponderEliminargloria a Dios, sigamos siempre adelante.
ResponderEliminarHermosa meditación amado... Gracias por bendecirnos con estas líneas.tu hno isrrael
ResponderEliminarBella la parola di Dio. Mi piace pensare che Gesù veduta la fede della chiesa che stava intercedendo con fervide preghiere operò la guarigione del paralitico. Grazie Gesù che hai dato il tuo sangue per la chiesa.
ResponderEliminarBella la parola di Dio. Secondo me, Gesù, veduta la fede della chiesa che stava intercedendo con fervide preghiere, operò la guarigione del paralitico. Grazie Gesù che hai dato il tuo sangue prezioso per la chiesa.
EliminarAlcune parole sono state modificate 😅
ResponderEliminarTu, dunque, cingiti i fianchi, àlzati e di’ loro tutto quello che io ti comanderò. Non lasciarti sgomentare da loro, affinché io non ti renda sgomento in loro presenza. Ecco, oggi io ti stabilisco come una città fortificata, come una colonna di ferro e come un muro di bronzo contro tutto il paese, contro i re di Giuda, contro i suoi prìncipi, contro i suoi sacerdoti e contro il popolo del paese.
ResponderEliminarGeremia 1:17-18 NR06
Forza e coraggio, fratello
Y tú, disponte a pelear * , puesto en pie les dirás todo lo que yo te ordene. Y no les tengas miedo, o seré yo el que te intimide. Mira, te he convertido desde hoy en plaza fuerte, serás columna de hierro, igual que muro de bronce, enfrentado a todo el país: a los reyes y príncipes de Judá, sacerdotes y pueblo de la tierra.
ResponderEliminarJEREMÍAS 1:17-18 BHTI
https://bible.com/bible/222/jer.1.17-18.BHTI